Reseña del Área de Desarrollo del Instituto Geofísico

Histórico (542)

25 de febrero de 2013

De manera similar a lo reportado en el informe especial No. 3 del 15 de febrero de 2013, la actividad sísmica del volcán se mantiene en un nivel considerado como moderado-bajo. Se han registrado desde el 15 de febrero hasta la fecha un promedio de 9 eventos sísmicos diarios, de este promedio 8 sismos son relacionados con movimiento de fluidos al interior del edificio volcánico. El número máximo de eventos contabilizados ha sido 21 el día 18 de febrero. Desde el 21 de enero no se han registrado explosiones.

De acuerdo a la información de la red de geodesia, la tendencia deflacionaria se mantiene en la parte superior del volcán y se registran ligeras inflaciones al noroccidente y suroccidente.

Los niveles de emisión de gases, detectados por la red de monitoreo de gases de SO2 se mantienen en valores considerados como bajos, con un máximo registrado de 1091 toneladas por día en la estación en la zona de Bayushig el 19 de febrero de 2013. La semana pasada, las concentraciones de emisión de SO2 oscilaron entre 53 y 353 ton/día en la estación de Pillate.

La zona del volcán se mantiene la mayor parte del tiempo con alta nubosidad y la presencia de lluvias de diferente intensidad, razón por la cual no se ha realizado monitoreo visual y térmico permanente. Sin embargo, cuando las condiciones climáticas han sido favorables se ha observado la presencia de penachos de vapor de agua, color blanco de menos de 100 metros de altura. No se han reportado ruidos ni bramidos en las últimas semanas.

Emisión de vapor muy débil registrada el 17 de Febrero desde el Observatorio Vulcanológico del Tungurahua. Fuente: J. Ordoñez-OVT/IGEPN

 

En base a todo lo mencionado se puede concluir que la actividad del volcán se mantiene en un nivel considerado como moderado a bajo. Debido a las condiciones climáticas presentes en la zona es necesario mantener especial atención a la generación de flujos de lodo o lahares que afectan principalmente a las zonas en las cuales tienen influencia los drenajes que nacen en el volcán. 

El Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional mantiene el monitoreo y vigilancia permanente de la actividad del volcán Tungurahua. 

LT/MR/PM

Instituto Geofísico

Escuela Politécnica Nacional

18h00 (tiempo local)

15 de febrero de 2013

Desde el 25 de enero del 2013, fecha de publicación del informe especial No.2, el volcán Tungurahua ha presentado un nivel de actividad superficial bajo, siendo la única expresión superficial observada, una leve actividad fumarólica y pequeñas emisiones de vapor a nivel del cráter. En tanto, la actividad sísmica se caracteriza por la generación de sismos del tipo largo período, con un promedio de 29 por día y eventos volcano-tectónicos, con un promedio de 2 por día. Esta actividad sísmica se encuentra asociada con la presurización y movilización de fluidos y fracturamiento de rocas al interior del edificio volcánico. De manera general, el número de sismos contabilizados muestra una tendencia descendente, con un máximo de 67 sismos del tipo LP registrados el 30 de enero y un mínimo de 8 sismos registrados el 12 de Febrero. No se han registrado explosiones. 

Con respecto a la información obtenida de la red de monitoreo de gases se señala que las emisiones de SO2 se han mantenido en valores bajos, es decir, menores a 500 toneladas por día. Por otro lado, la red de geodesia encargada de detectar cambios en los flancos del cono volcánico, registró una tendencia inflacionaria en la parte superior del edificio, observándose un incremento en sus valores entre los días 05 y el 12 de Febrero. Sin embargo, en los últimos 3 días (13-15 de Febrero) este incremento se ha detenido y se observa un patrón más estable.  

En base a lo señalado se puede concluir que la actividad superficial, sísmica, de gases y de deformación, muestra niveles considerados como bajos. Por lo tanto se espera que esta tendencia se mantenga en los próximos días o semanas.  

El Instituto Geofísico se encuentra monitoreando de manera permanente la actividad del volcán y en caso de que se produzcan cambios detectables en los distintos parámetros obtenidos de la red de vigilancia del volcán serán comunicados a las autoridades y al público en general.  

PM/SH/MR/LT/AA/GR

Instituto Geofísico

Escuela Politécnica Nacional

16:00 (tiempo local)

09 de febrero de 2013

Hoy, 09 de Febrero, a las 09h16 (tiempo local) ocurrió un evento sísmico de magnitud Mw=7.0 (energía liberada) que fue localizado por la Red Nacional de Sismógrafos (RENSIG) del IGEPN, a una latitud de 1.11° Norte y a una longitud 77.67° Oeste, con una profundidad de 152 km. La población más cercana es Túquerres en Colombia que se encuentra a unos 30 km al Norte de la frontera entre Ecuador y Colombia. Hay que resaltar la gran profundidad de este sismo, lo que hace que la distancia entre la población más cercana (Túquerres) y el foco de liberación de la energía sísmica sea grande (>150 km), lo que explica que a pesar de su alta magnitud no se reporten daños.

El terremoto fue sentido en las poblaciones ubicadas en todo el país a excepción de la zona austral, incluyendo las ciudades de Tulcán, Ibarra, Lago Agrio, Esmeraldas, Portoviejo, Quevedo, Manta, Guayaquil, Riobamba y Ambato. Por la forma en la cual fue sentido se estima un valor de intensidad de 5 en la zona comprendida entre Tulcán-Ibarra-Esmeraldas, 4 en Quito y sus alrededores y 3 en la zona de Ambato-Riobamba-Guayaquil. La intensidad se estimo en función de la Escala Macrosísmica Europea (EMS-98) que describe la forma como las personas sienten los temblores y como las estructuras reaccionan ante el paso de las ondas sísmicas. En estos niveles de intensidad aún no se producen daños en las estructuras.

El origen de este sismo es un desgarre o rotura en la parte interna de la placa de Nazca que esta penetrando oblicuamente por debajo de la placa continental de Sudamérica. Este tipo de terremotos se caracteriza por ser sentido en zonas muy amplias, pero por su profundidad su capacidad de producir daños es muy limitada. Se caracterizan también por no producir réplicas posteriores, y si las hay en general son muy escasas y de menor magnitud. El último terremoto de estas características que ocurrió en el territorio nacional fue el 12 de Agosto de 2010 con una magnitud Mw=7.2, una profundidad de 254 km, fue sentido en todo el país y no produjo daños.

 

HY/AA

Instituto Geofísico

Escuela Politécnica Nacional

12:00 (tiempo local)