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Sismos

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Uno de sus objetivos fundamentales es el monitoreo sísmico permanente de la actividad de origen tectónico y volcánico del territorio nacional.

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Volcanes

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Los volcanes activos son observados a través de diversas tecnologías.

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La tecnología comprende un conjunto de teorías y técnicas que permiten el aprovechamiento práctico del conocimiento científico. No es de sorprenderse que a diario aparezcan nuevas técnicas y revolucionarias teorías que permitan que la tecnología avance a pasos agigantados, facilitando procesos y resolviendo problemas dentro de diversas áreas del quehacer de la comunidad en general.


Desde su creación, el IG ha visto la necesidad de utilizar instrumentos que le permitan realizar una precisa vigilancia tanto en sísmica como en varios otros parámetros relacionados al vulcanismo.

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El día jueves 22 de junio de 2017 el Ing. Santiago Santamaría y el Ing. Marco Almeida, miembros del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IGEPN), recibieron la invitación de la Universidad Técnica del Norte (UTN) localizada en Ibarra, para brindar conferencias sobre temas relacionados a la evolución de diferentes complejos volcánicos dentro de la provincia de Imbabura.

Estas investigaciones han sido desarrolladas a lo largo de varios años de trabajo en el campo (y que a la fecha se siguen llevando a cabo).  Además hubo la posibilidad de compartir nociones básicas sobre la vulcanología en un contexto general y más específico en el Ecuador. A esta conferencia asistieron alumnos de diferentes facultades en dicha institución, teniendo una gran acogida con la comunidad estudiantil.

Técnicos del Instituto Geofísico recibieron la invitación de la Universidad Técnica del Norte en Ibarra

Foto 1. Los representantes del IGEPN junto al rector de la UTN, el Dr. Marcelo Cevallos.

Por Abdul Sattar / The Associated Press

Habitantes de Jafarabad, Pakistán, oran frente a sus viviendas después del terremoto de la madugada del miércoles del 19 de enero.

QUETTA, Pakistán -- Un potente sismo en Pakistán, que sacudió edificios en la India, Afganistán y Emiratos Arabes, provocó graves daños en las viviendas de adobe cercanas al epicentro, pero no causó muchos daños, ni víctimas.

El terremoto de magnitud de 7,2 grados a las 1:30 de la madrugada del miércoles, en una área remota del sudoeste de Quetta, capital de la provincia de Baluchistan, no muy lejos de la frontera afgana. Al producirse el sismo miles de personas salieron despavoridas de sus viviendas en medio del pánico.

Los temlores se sintieron por todo el sur y el centro de Pakistán, Afganistán, la India y los Emiratos Arabes, dijeron los residentes.

El terremoto dañó unas 200 viviendas en Dalbandín, un pueblo de 15.000 personas situado cerca del epidentro, dijo que Nadeem Ahmed, presidente de la Agencia Nacional de Manejo de Desastres de Pakistán. No se informado de víctimas hasta el momento en todo el país, indicó.

Pero las autoridades seguían registrando las zonas remotas de Baluchistan, relató Saeed Jamali, comisionado adjunto del distrito de Chaghi.

La Agencia Meteorológica de Japón (AMJ) informó el 22 de diciembre de un terremoto de 7,4 grados en la escala de Richter con epicentro al este de las Islas Bonini, aunque no se espera que ocasione daños de consideración.

En un primer momento la AMJ emitió una alerta a las 02:28 (hora local de Japón) ante la previsión de que olas de hasta 2 metros pudieran impactar las islas cercanas. La alerta fue finalmente retirada a las 07:20 (hora local de Japón).

La Agencia Geológica de Estados Unidos (USGS) coincidió en cifrar en 7,4 grados la magnitud del movimiento. El epicentro se situó a 14 kilómetros de profundidad y a 1 875 kilómetros al suroeste de Tokio.

30 de enero de 2012

 

A las 10:36 (tiempo local) del 31 de enero de 1906 se produjo un sismo de magnitud (Mw) 8.8 con epicentro en el océano Pacífico y frente a la frontera Ecuador-Colombia. Este es uno de los sismos más grandes registrados en el mundo y tiene la misma magnitud del terremoto de Chile del 27 de febrero de 2010.

De acuerdo a la documentación de la época el sismo produjo los mayores daños en la provincia de Esmeraldas, en poblaciones como Esmeraldas, Río Verde, Limones, La Tola  y en la zona de Tumaco - Colombia. De acuerdo a las investigaciones llevadas acabo por Egred (sin publicar), el sismo no generó consecuencias catastróficas en las zonas mencionadas debido a que no existían en la época grandes centros urbanos; sin embargo los estragos se extendieron hasta las provincias norteñas de la Sierra del Ecuador. De acuerdo a la página de la NEIC-USGS (National Earthquake Information Center del Servicio Geológico de los Estados Unidos, http://earthquake.usgs.gov/) los daños por este sismo ocurrieron tan lejos como Cali - Colombia hasta Otavalo - Ecuador, siendo sentido hasta Maracaibo - Venezuela.

De acuerdo al artículo elaborado por Rudolph y Szirtes (publicado originalmente en 1911), en el cual realizan un compendio y evaluación de los efectos del terremoto del 31 de enero de 1906, se resalta que testigos de la época relatan que en la zona de Tumaco (Colombia) "Fue imposible mantenerse en pie sin apoyo". En un informe periodístico que incluye este trabajo se señala que "Todos fueron arrojados al suelo. Toda la isla estaba en movimiento y todas las casas se mecían de un lado a otro, como un barco en mar embravecida, de tal manera que uno tenía que temer que en cualquier momento podrían desplomarse y enterrarnos bajo sus escombros. El movimiento del terreno fue tan fuerte que hacía imposible moverse del sitio." De acuerdo a reportes adicionales del mismo artículo, el mismo sismo en Guayaquil hizo que las campanas de las iglesias estuvieran repicando por si solas por más de 80 segundos, y según las estimaciones de las personas ubicadas en o cerca a la zona de Tumaco y Esmeraldas, el terremoto tuvo una duración mayor a los 2 minutos.

El NEIC-USGS señala que la altura de las olas del tsunami producido por el sismo fue sobre los 5 metros en la zona de Tumaco y al parecer afectó las costas cercanas al epicentro a menos de treinta minutos de ocurrido el sismo. De acuerdo a los reportes de la época varias olas asociadas al tsunami afectaron la zona de Esmeraldas y horas después fueron percibidas en Bahía de Caráquez y Guayaquil. En la investigación realizada por Espinoza (1992) y publicada en el Acta Oceanográfica del Pacífico,  se señala que "las olas del tsunami fueron muy destructivas en las costas bajas y planas existentes desde Río Verde hacia el norte, donde todas las viviendas asentadas cerca de la playa o en la zona estuarina formada por los Ríos Santiago y Mataje fueron destruidas; alrededor de unas 1000 a 1500 personas murieron. En La Tola, más de 23 viviendas fueron destruidas. En Esmeraldas el río se salió de su cauce inundando las zonas bajas de la población"

Investigaciones posteriores señalan que el área de ruptura involucrada en este sismo fue de aproximadamente 500 km, es decir la zona de ruptura fue desde el Puerto de Manta en Ecuador hasta Buenaventura en Colombia (compilado por Segovia, 2001). Además, se registraron en el sistema de monitoreo sísmico del Observatorio Astronómico de Quito 4 sismos premonitores en nuestras costas. 

Este sismo es uno de los tantos que han ocurrido en la zona de subducción frente a Ecuador, y que resulta del choque de la placa Océanica de Nazca con la placa continental Sudamericana. El Ecuador forma parte del Anillo de Fuego del Pacífico, que es una de las zonas con mayor actividad sísmica en el planeta, y que en los últimos años ha experimentado por lo menos 3 sismos de magnitud grande (superior  a magnitud 8), como son el terremoto de Sumatra de 2004 de magnitud 9.1 (Mw), el terremoto de Chile de 2010 de magnitud 8.8 (Mw) y el terremoto de Japón de 2011 de magnitud 9.0 (Mw), los cuales se caracterizaron no sólo por generar tsunamis que afectaron importantes zonas del mundo, sino que lastimosamente generaron un importante número de víctimas, pérdidas materiales y secuelas que serán superadas al mediano o largo plazo, como es el caso de Fukushima. En este momento de la historia donde las comunicaciones juegan un papel importante en el desarrollo de las sociedades, es vital que países como el Ecuador mantenga viva sus memoria histórica sísmica para aprender de los errores, pero sobretodo generar desde lo personal hacia lo familiar y social una cultura de prevención. Todo esto con el gran objetivo de saber cómo enfrentar un evento sísmico, pero sobretodo cómo aumentar lo probabilidad de sobrevivencia de la persona y su familia ante la ocurrencia de un sismo y tsunami.

 

LT

17:30 (Tiempo local)

Instituto Geofísico

Escuela Politécnica Nacional 

 

 

Antimio Cruz
2011-08-09
Fotografías satelitales publicadas ayer por la NASA demostraron que el terremoto y el tsunami que afectaron a Japón el pasado 11 de marzo viajaron miles de kilómetros y provocaron fracturas y desprendimiento de icebergs en el Polo Sur del planeta.

Las olas y vibraciones que viajaron 13 mil kilómetros desde el epicentro del sismo, en Japón, hacia el norte del planeta quebraron hielos que tenían miles de años juntos y que ahora son bloques de hielo flotantes con una superficie que mide más que un campo de futbol soccer. La superficie total afectada, de la cual se generaron esos desprendimientos, equivale a dos veces el tamaño de la isla de Manhattan, en Nueva York.

Un fenómeno parecido había sido registrado con narraciones verbales en el siglo XIX en América del Sur. Gigantescos bloques de hielo o icebergs fueron vistos frente a las costas de Chile después de que ocurrieron fuertes terremotos, pero ésta es la primera prueba, con fotografías satelitales. Uno de los datos más impresionantes es que la alteración surge de un terremoto originado a más de 13 mil 600  kilómetros del Polo Sur y pudo fracturar las gruesas capas de hielo, que tienen cientos de metros de profundidad.

El estudio fue publicado este lunes en la revista científica Journal of Glaciology y en el portal de la NASA en la dirección www.nasa.gov/topics/earth/features/tsunami-bergs.html.

ESTUDIO. El hallazgo fue encabezado por una científica llamada Kelly Brunt, que es experta en un campo de investigación llamado Criosfera, que es el estudio de las zonas del planeta que están permanentemente cubiertas con hielo. Su centro de trabajo es el Centro Goddard de Vuelo Espacial.

Ella y sus colegas pudieron demostrar que sí hay un vínculo, del tipo causa y efecto, entre el desprendimiento de gigantescos icebergs de la plataforma de hielo llamada Sulzberger, en la Antárctica

El nacimiento de un iceberg puede darse en múltiples procesos. A menudo, los científicos ven los monolitos imponentes, congelados, entrar en los mares polares y trabajan hacia atrás para averiguar la causa.

Por eso, cuando el tsunami de Tohoku fue provocado en el Océano Pacífico el 11 de marzo en la primavera, Brunt y sus colegas de inmediato miraron hacia el sur. Durante todo el camino hacia el sur utilizaron múltiples imágenes de satélite, Brunt, Emile Okal, de la Universidad Northwestern, y MacAyeal Douglas, de la Universidad de Chicago, fueron capaces de observar nuevos icebergs flotando en el mar poco después de que el oleaje por el tsunami llegó a la Antártida.

Para poner la dinámica de este evento en perspectiva: Un terremoto en la costa de Japón causó enormes olas que estallaron fuera de su epicentro. El agua se desplazó hacia una plataforma de hielo en la Antártida o Antárctica, a 13 mil 600 kilómetros de distancia, y cerca de 18 horas después de ocurrido el terremoto, las olas rompieron varios trozos de hielo que en conjunto equivalía a dos veces la superficie de Manhattan.

Gracias a que ya existía una hipótesis sobre este posible efecto, los científicos fueron capaces de ver las capas de hielo antártico en un proceso lo más cercano a tiempo real,  como lo permiten las imágenes de satélite, y echar un vistazo a un nuevo iceberg flotando en el mar de Ross.