El sismo responde al movimiento de una falla de tipo inverso; la figura adjunta muestra el mecanismo de la fuente (falla). Este tipo de fallas son comunes en la zona y limitan el frente de deformación subandino. Eventos de este tipo no son raros en el registro sísmico y pueden ser tanto de magnitudes moderadas como de grandes: tal es el ejemplo del Terremoto de Macas o Cutucú en 1995 que tuvo una magnitud de 6.8-6.9. En el presente caso, este sismo de 6.1 grados corresponde a un sismo de magnitud moderada que afortunadamente no causó daños al estar su epicentro en una zona despoblada y relativamente lejos de centros poblados.

Figura 1. Mecanismo focal del evento registrado el 18 de abril de 2017 a las 12h50 (TL).
Solución SWIFT/RENSIG

Luego del evento principal, se registraron 7 réplicas con magnitudes entre 4 y 5 grados. No se descarta que ocurran nuevas réplicas pero probablemente serán de magnitudes menores y ocurrirán de forma más espaciada en el tiempo.
El Instituto Geofísico permanece atento a la evolución de la actividad sísmica en la zona y emitirá informes oportunos si se presenta alguna novedad.
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